CUENTO LUPA

El cuento lupa que hoy os enseño, lleva hecho ya unos cuantos años por los niños de los talleres de los Soles. 

Los hicimos con motivo del día del libro y luego los niños los estuvieron contando en sus aulas de referencia. 

Este pasado fin de semana, estuve con mi amiga Mabel, mi más fiel seguidora!!! la hablé del cuento lupa, y la prometí que haría la entrada de hoy para explicarla cómo lo hicimos.

Elegimos dos cuentos muy conocidos, los 3 bandidos y el topo que quería saber quién se había hecho aquello en su cabeza.

¿Qué material necesitamos? sencillo y barato.

- Láminas de acetato. 

- Rotulador permanente de color negro para escribir y dibujar sobre el acetato.

- Cartulina negra. 

- Folio blanco o cartulina blanca, que usaremos para hacer el visor (un círculo que pegaremos al rectángulo anterior de cartulina negra). 

- Lana o cuerda, para sujetar la lupa al libro y así no se perderá.

El cuento del topo fue calcado por los niños, pues eran niños muy pequeños, sin embargo el cuento de los 3 bandidos lo dibujaron y lo escribieron ellos solos, desarrollando al máximo su creatividad.

¿Cómo lo hicimos? fotocopiamos una a una las hojas del cuento y las repartimos a cada niño.

Pusieron encima de cada hoja el acetato, y calcaron tanto las ilustraciones como el texto con el rotulador negro permanente. 

Una vez terminados todos los acetatos con los dibujos, se van alternando con una cartulina negra, de esta forma conseguimos el efecto de que el texto y la ilustración queden ocultas por el color negro de la cartulina. Después se encuadernan y ya tenemos nuestro cuento terminado.

Pero falta lo más importante: la lupa o linterna como dicen los niños.
Para ello dibujamos un círculo en el folio blanco y se recorta. Por otra parte, hacemos el asa con un rectángulo de cartulina negra. Se pega el círculo sobre la cartulina negra y ya tenemos construida nuestra lupa que es indispensable para poder leer el cuento. 

Si no queremos que se nos pierda, se debe hacer un agujero al final de la lupa y lo sujetamos con lana a la espiral del cuento.

Para leer el cuento, colocamos la lupa entre el papel de acetato y la cartulina negra, creando un efecto mágico ya que se ilumina la zona por la que vas pasando. 

¡Máxima concentración!

Dedicaré otro post exclusivo al cuento del topo, o como lo llaman los niños: ¡el libro de las cacas! es buenísimo y a mi hija la encanta...

¿Habías visto alguna vez un cuento lupa? 

Sin duda es una manera muy original y divertida de fomentar el gusto por la lectura. 

Y si además permitimos que los niños libremente dibujen  y escriban sus propios cuentos, fomentaremos la creatividad y la expresión plástica, dejando salir el artista que todo niño lleva dentro y convirtiéndose en verdaderos ilustradores y autores de cuentos.

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